jueves, 4 de noviembre de 2010

La entrevista más rara

Martín llegó a la hora pautada al hostel donde iba a tener su entrevista laboral. Si, un hostel. Él no tiene ningún tipo de experiencia en hotelería ni turismo, pero durante el viaje que hizo meses atrás conoció la magia que albergan estos lugares, y comenzó a pensarlo como una alternativa laboral una vez que estuviese de regreso en Buenos Aires. Pedro, un amigo suyo trabaja en uno de estos hostels en pleno centro porteño, así que a través de él pudieron programar la entrevista.

El lugar desde afuera no dice nada (es tan sólo una puerta negra) pero en su interior hay decenas de personas de todas las nacionalidades yendo y viniendo constantemente. Más allá de la recepción se veían colgando del techo banderas de unos cuantos países, lo cual le produjo a Martín muchos recuerdos del hostel en Cusco. En la entrada lo recibió un hombre que le entregó un formulario de solicitud de trabajo que debía completar, así que se acomodó ahí mismo en un sillón, birome en mano. Las primeras preguntas eran simplemente datos personales, pero algunos renglones más abajo debió responder a cuáles eran sus características como persona. Un tanto extraño este ítem, pero también había que tener en cuenta que se estaba ofreciendo para un trabajo completamente fuera de lo común, para lo que estaba acostumbrado. Siguió avanzando con el formulario y aparecieron preguntas sobre si había viajado por el país y también al exterior, y dónde se había hospedado en aquellos lugares. Más adelante llegaron preguntas de cultura general, como por ejemplo a qué país pertenecen la Islas Galápagos, en que año fue la Revolución Cubana, cuál es la capital de Nicaragua, entre otras. Pudo responder bien algunas, pero en otras tuvo que mandar fruta. Si bien Martín ya se había acostumbrado un poco al formulario con preguntas un tanto extrañas, el súmmum fue la última: “Si hay una pelea entre Batman y Optimus Prime, ¿quién crees que gana y por qué?” Definitivamente esto ya escapaba a todo lo medianamente razonable, pero igualmente la respondió, riéndose en su interior.

Minutos más tarde llegó Julieta, la chica que lo iba a entrevistar, y se ubicaron ambos en otro sector del hostel. Comenzaron a charlar, ella preguntándole de dónde conocía a Pedro, qué había estudiado, dónde había trabajado anteriormente, y él respondía a todas sus preguntas. Terminó saliendo el tema del viaje, y al ella preguntar qué fue lo mejor del mismo, Martín comenzó a contarle, pero abruptamente se vio interrumpido por Julieta, quien pidió que se lo cuente, pero hablando en inglés. Pese a que él no es un maestro del idioma, pudo defenderse y terminó la explicación. Incluso ella repreguntó algo en inglés, a lo cual él tuvo que responder, y pudo hacerlo.

Si le preguntás a Martín cómo le fue en la entrevista, no va a saber responderte, porque en definitiva las entrevistas laborales son como los exámenes de la facultad, donde te podés haber sacado un dos o un ocho, pero es imposible saberlo de antemano. Si le preguntás para qué puesto es el trabajo, tampoco lo sabe, al igual que desconoce el horario y el sueldo que tendría. Pero esos terminan siendo detalles accesorios, porque si en una entrevista te preguntan por una pelea entre Batman y Optimus Prime, claramente vale la pena trabajar en ese lugar.

6 comentarios:

  1. Posta que si... lejos la mejor entrevista de laburo,,, jaja.


    ...y ya que viene al caso,,, claramente gana Batman... Optimus se traga el batitubo entero x la cola.

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  2. jajaj las comas suspensivas delatan a un incógnito Tonga,,,

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  3. nunca mas voy a aceptar un trabajo donde en la entrevista no me pregunten si gana Batman u Optimus Prime!!!
    zafado Pana, te envidio mucho...ojala te tomen!!!

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  4. ajjaja una entrevista sin desperdicio...sin duda! aparte le relataste todo en inglish like a champion jajaj.
    Ojala te tomen amigo campion}

    Dr. Coco

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