miércoles, 30 de diciembre de 2009

Karma Police VII

Previously on Karma Police:
Me hacen subir a un patrullero y me llevan para atestiguar un procedimiento en la casa de un loco. El grupo GEO entra a la casa y el canadiense se entrega. Después del operativo nos llevaron a la comisaría...


Me senté en el banco. Las pseudo conversaciones con la mujer del canadiense se reiteraron en más de una oportunidad, y a medida que pasaba el tiempo fui dandome más al diálogo. El otro testigo no participaba mucho, en parte porque estaba más alejado, y por otra parte porque ella me empezaba a hablar a mi. Le pidió un cigarrillo a uno de los policías. Los minutos corrían. Un par de personas que estaban en la recepción de la comisaría cuando nosotros llegamos, se habían ido. Oficiales entraban y salían todo el tiempo. Hubo una discusión llevada a cabo por algunos miembros de la fuerza policiaca en una de las oficinas del fondo, pero los gritos se escuchaban. Ella pidió otro cigarrillo, y se sentó al lado de la ventana entreabierta para que las cenizas no caigan adentro. Alguien nos preguntó si el domicilio que figuraba en el DNI era el actual. Entraba y salía gente que aparentemente iba a visitar a alguien que estaba ahí. Un oficial que estaba en otra oficina la llama a la mujer. Más gente entraba y salía. De fondo se escuchaba el radio de comunicación. Todavía había claridad en el cielo. El reloj avanzaba, pero a su vez el tiempo se hacía eterno. Hubo recambio de personal, que arrancaba su horario laboral. Ella salió de la oficina y volvió a sentarse en el mismo banco que yo. Un perro viejo aprovechaba el ingreso o egreso de alguna persona al edificio, para hacer lo mismo. El radio constante se empezaba a volver cansador. Otro policía preguntó cuál era la ocupación mía y del otro testigo. Cada tanto se escuchaba alguna llamada de atención por parte de un superior. Otra vez ingresa alguien. El perro da vueltas para acostarse sobre una manta revuelta que estaba cerca de una estufa. Ella nuevamente fue llamada a declarar. El radio no descansaba. Algún policía se iba en uno de los patrulleros. El reloj seguía avanzando. Ella sale de la oficina, y me dice que tenía que ir yo a declarar. Entro, y un oficial me pide que le cuente lo que pasó, mientras él lo va escribiendo en una PC. Terminado esto, lo imprime con una obsoleta tecnología de matriz de punto, que hacía interminable el proceso. Pedí permiso para ir al baño. Cuando salgo del mismo, el otro testigo estaba dando su declaración. Me siento en el banco. Ella estaba tomando algo caliente en una taza, y por primera vez le vi cara de haber caído en la situación en la que se encontraba. Tenía ojos llorosos. Terminó de tomar, y fue a dejar la taza. Pidió un nuevo cigarrillo. El otro testigo salió y se fue. Viene el oficial que tomó la declaración, y me pide que le firme la hoja. Me agradece y me da la mano. Ella estaba de pie al lado mio, también me da las gracias, me da la mano levemente humedecida, me saluda con un beso, me pregunta mi nombre, nuevamente me agradece y me pide perdón por todo el tiempo que estuve ahí. Le dije que no había problema, y le desee mucha suerte. Salí a la calle, y fue como haber recuperado una libertad, que en realidad siempre tuve... supongo. Habían pasado tres horas desde que llegamos a la comisaría, y 4 en total, desde que subí al patrullero. Ya era de noche, y estaba más lejos de casa que cuando fui interceptado por la policía. Pero eso era lo que menos importaba. Sentía paz de estar nuevamente en la calle, y tener libertad para seguir mi camino. Treinta minutos de caminata más tarde estaba llegando a casa, pero en todo el trayecto no pude evitar pensar en cómo seguirían los días de ella. Yo estuve participando de un operativo en contra de mi volutand por cuatro horas, pero al salir a la calle todo recobraba su normal acontecer. Pero para ella no iba a ser así. Hubo definitivamente un quiebre en su vida, y ahora iba a costar acomodar las fichas.
hoy me di cuenta que desde el colectivo se ve la puerta de su casa.

FIN

1 comentario:

  1. Seguis pasando por la puerta de la casa?
    No volviste a ver a nadie por ahí? (me refiero a ella o al canadiense)

    Beso
    Alejandra (TUTI)

    ResponderEliminar