martes, 5 de enero de 2010

Aromas 1

Dos veces en menos de diez días. Dos veces en que sin previo aviso comienzo a sentir ese perfume, que no proviene de alguien que simplemente pasó y dejó su fragancia flotando en la atmósfera, sino de alguna persona que ha decidido instalarse en mis inmediaciones, carente de la idea del daño que puede provocar. ¿Simple casualidad o una especie de prueba que es impuesta? Sea cual fuere la respuesta, no tengo demasiadas alternativas. Me quedo inmóvil, sintiendo como aquel aroma invade mis pulmones, causándome satisfacción al tiempo que me desgarra, esperando que repentinamente aparezca algún remolino de viento que decida empujar al perfume hacia otro sector, librándome así mas no sea por unos segundos de ese padecimiento. Tal cosa jamás sucede, y a medida que mi interior se va impregnando, el cerebro empieza a desprender pequeños ecos del pasado, que se copian a sí mismos hasta cubrir completamente el interior de mi cabeza. Turbado, sólo puedo esperar que la fragancia se desvanezca, para que así la mente se reacomode luego de un tiempo prudencial, que espero no sea muy extenso.

4 comentarios:

  1. Excelente texto amigo... fantastico navegar y encontrar buena tinta en nuestro camino.
    Nos veremos, y seguramente volvere a este blog.
    saludos

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  2. Sos una ternura de rulos.

    El jueves a la 5, espero mapa indicativo!

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  3. Tremendo el tema de los aromas que te obligan a evocar. Como puede ser que duela el mismisimo aire, no?


    Che, no sabía de Michi, acabo de ver su foto...era un sola así de enorme eh!

    beso y abracito!

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  4. Qué Calidad !!!!!! Textual y Gráfica !!!
    Me emocionás...
    T.Q.M.!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
    LiBeD

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